Día 83 :: Lunes de Fiesta

Lunes 12 de Diciembre de 2011

Antes que nada :: -Madre mía, ¡felicidades en tu día! Gracias por tu amor, por tu protección, por todos tus milagros. Gracias por tu misericordia, por abrirme tu corazón, por llevarme en tus brazos y guiarme por buen camino. Sin ti mi fe no existiría -te quiero.
-Estoy agotado, anoche que llegue de mi viaje de Londres pensé que hiba a poder descansar, pero no fue así. De la nada se escucha el timbre de nuestra piso –era Israel (el bartender de Low Cost). El chico venia con un par de copas por encima, tantas que entro hasta mi habitación sin importarle que la puerta estuviera cerrada y me dice; “vengo a invitarlos a una zambomba, si les apetecéis nos vemos en 30 minutos”. Con todo el dolor de mi corazón, dije que si. Así de la nada me arregle y terminamos yendo a Barabass, un bar cercas de nuestro piso. Estuve ahí un par de horas y luego dije adiós, me tomo una cerveza para darme cuenta que en realidad estaba muerto y que lo único que quería hacer era dormir.

Continuemos con el Lunes…
Hoy celebramos el cumpleaños de Leah. Su cumpleaños fue el pasado viernes, pero como muchos de nosotros andábamos de viaje decidimos celebrar su día cuando todo estábamos de vuelta. El caso es que fue todo un reventón. Leah, Yajaira y yo cocinamos como locos; como si la mitad del mundo fuera venir a cenar a nuestra casa. Cocinamos pollo frito, espagueti con salsa de carne y enchiladas de queso con salsa roja y verde. Lo sé, fue todo un manjar. Y más porque nuestros compañeros nos sorprendieron con chocolates, dulces, botellas de vino y por supuesto; un pastel para la festejada. Hubo comida de mas, tanta que a pesar que todos nos servimos mas de dos veces, nos sobro un buen para el resto de la semana –recalentado jajaja. Entre todo lo que comimos mi platillo favorito fue la empanada de atún que Daniel trajo de su casa. Dios, su madre sí que sabe cocinar. Es la segunda vez que tengo la suerte de comer este platillo –y siempre es como si fuera mi primera vez; como y como hasta no poder comer más. No la pasamos muy bien. Comiendo, bebiendo, celebrando a nuestra “compi” Leah. Si que estamos un poco zafados de la cabeza, pues solo a nosotros se nos ocurre hacer fiesta en pleno Lunes -principio de semana. A pesar que los invitados se fueron “temprano” nosotros nos quedamos hasta tarde charlando; vaciando cuanto botella de vino posible. La noche se paso rápido, tan rápido que no recuerdo un par de detalles.
Este lunes si que toco, toco antes de tiempo….