Dia 26 :: Tarifa

Viernes 14 de Octubre de 2011

Camino a Tarifa (Cádiz) España
El plan era viajar a Tarifa; la punta sur del continente Europeo, subir a un barco y ver ballenas nadar en el Atlántico. Desgraciadamente, no fue así…
Llegamos a Tarifa el viernes por la tarde y lo primero que nos dijeron fue que no iba a salir ningún barco debido al mal clima. Fue entonces que pensé, ¿Qué voy hacer en este pueblo? Un poco agobiado por la situación, decidí que no valía la pena echarse para atrás… que lo mejor era hacer del fin de semana algo inolvidable.
Pagamos por nuestra habitación y nos fuimos a caminar por la playa. Que puedo decir, su playa me dejo boca abierta. Tenía años sin ver un agua tan clara como la que vi esta tarde. La última vez que vi una amalgama de verdes y azules fue en Costa Rica cuando nade en el Caribe. A pesar que el agua se miraba tan rica y las olas muy divertidas; no me dejar llevar por la tentación y evite el chapuzón. Preferí ver el agua desde la arena que nadar y enfermarme de nuevo.
Mientras unos se divertían dentro del agua, otros nos fuimos a explorar. Camino a la punta del pueblo donde el Mediterráneo y el Atlántico se unen vi a lo lejos una de las cosas más espectaculares de mi vida: África…
Dios, la emoción fue tan grande que me emocione mas por ver como la cordillera se distinguía a las espaldas del Mediterráneo, que haber visto el mismo Mediterráneo por primera vez. Nunca en mi vida me había sentido tan bien conmigo mismo; sentí que había logrado una COSA más en mi vida. El paisaje fue inolvidable, ver tantas cosas nuevas a la vez me hizo sentirme vivo.
Nuestra aventura no termina ahí; después de esta experiencia mis compañeros y yo pasamos al Castillo de Guzmán el Bueno; castillo que fue construido en el año 960 después de Cristo. Dentro del castillo vimos un sinfín de ruinas, catapultas, y subimos a su torre más alta; donde pudimos observar en su totalidad el pueblo de Tarifa. Para haber empezado mal, nuestro primer día en Tarifa fue espectacular. Nunca en mi vida llegue a imaginar que esta tarde iba a ver una pequeña pizca del inmenso continente Africano.
Antes de regresar al hostal, cenamos pizza en La Tabla; restaurante que un amigo me recomendó. Con el estomago lleno caminos al antiguo casco de Tarifa, donde disfrutamos un poquito de la fiesta que se vive en Tarifa; el punto sur del continente Europeo.